Dependiendo del diseño, el Viaducto Sur de Guayaquil o Quinto Puente podría requerir inversiones de alrededor de USD 1500 millones.
La agencia de inversión público-privada SIPP presentó tres alternativas. Una implica un gasto de capital de USD 924 millones durante cuatro años y un gasto operativo de USD 293 millones durante 26 años. Una segunda opción requeriría un gasto de capital de USD 961 millones durante cinco años y un gasto operativo de USD 475 millones durante 26 años. La tercera alternativa costaría USD 1430 millones durante seis años y requeriría un gasto operativo de USD 542 millones durante 24 años. Hasta el momento, se prefiere la segunda opción.
El puente, que se construirá bajo la modalidad de asociación público-privada, se considera esencial para optimizar el acceso al puerto de la provincia de Guayas. Cruzará el río Guayas y otras obras incluyen la construcción de vías de acceso para ayudar a aliviar la congestión.
Según los planes, el puente conectará el puerto y el sur de Guayaquil, facilitando el tráfico desde, entre otras, las regiones costa y oriente del país en beneficio de los sectores productivos y exportadores.
El proyecto en su conjunto contempla 44 kilómetros de vías, el puente, que será el más largo del país, y cuatro puentes menores. El tráfico pesado podrá ingresar directamente al puerto, sin necesidad de pasar por la ciudad.
El Ministerio de Obras Públicas será el encargado de adjudicar la concesión. Recientemente transfirió USD 35 millones de un total de USD 120 millones a Guayas para 24 kilómetros de carreteras que conectan con el viaducto planificado. Otros USD 50 millones se transferirán a finales de este año y el resto en 2026. Estas carreteras no serán parte de la licitación.
Las autoridades afirman que el viaducto beneficiará directamente a 3.4 millones de personas y reducirá los tiempos de viaje de dos horas a 45 minutos, además de generar menores costos de transporte y logística.
El presidente Daniel Noboa dijo en un evento que el puente, propuesto por primera vez en 2009, representa una deuda histórica con la provincia y la ciudad.
Los expertos estiman que la licitación podría lanzarse en 2026. El nuevo gobierno asumirá el cargo en mayo.
Fuente: bnamericas.com
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