El proyecto de rehabilitación y administración mediante peaje de un tramo de 41 kilómetros en la autopista entre Escuintla y Puerto Quetzal, en Guatemala, ha despertado el interés entre 10 inversionistas, informa Prensa Libre.
Las empresas son mayoritariamente extranjeras, de México, España, Israel, Italia, Argentina, Perú y Colombia. Una de ellas es guatemalteca. Todas ellas intentarían competir en la licitación de las obras de una de las carreteras más transitadas del país centroamericano. De hecho, es usada diariamente por más de 2.00 vehículos pesados y el 56% de las exportaciones del país salen al exterior por Puerto Quetzal. El proyecto se desarrollaría mediante el esquema de Alianza Público Privada.
Entre las empresas interesadas destaca el Consorcio Autopistas de Guatemala, compuesto por Precom y Marhnos (de origen guatemalteco y mexicano) y que en la actualidad opera la autopista de peaje Palín-Escuintla.
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