El gerente general de la Cooperativa Boliviana de Cemento, Industrias y Servicios (Coboce), Javier Flores Pedriel, reveló que el consumo de cemento, de enero a junio de este año, disminuyó con relación al crecimiento mostrado en los tres últimos años. “Desde el periodo de alto consumo (septiembre-diciembre de 2016) ya se percibieron síntomas de un deterioro que se confirmó en el primer semestre de este año. Si bien el sector no ingresó en recesión, el crecimiento se situó alrededor del 5% marcando un periodo de contracción de la demanda”, puntualizó.
A su juicio, la baja de ingresos en las alcaldías y gobernaciones ralentizó la ejecución de proyectos programados para este año y la prolongada temporada de lluvias fueron los principales factores que impactaron en la baja del consumo de cemento.
Al respecto, la cementera Itacamba cree que la desaceleración de la economía y el régimen de lluvias, mayor que en 2016, condicionaron el ritmo de trabajo y el desenvolvimiento del sector de la construcción, lo que desequilibró la demanda de cemento. Empero, aseguran que las ventas de cemento Camba en Santa Cruz han crecido y que ahora acapara el 30% de la preferencia en este mercado.
Desde la Sociedad Boliviana de Cemento (Soboce), aseguran que las ventas en la industria no han registrado un crecimiento respecto al año pasado durante el primer semestre debido al retraso de ejecución de varios proyectos por diversos motivos. No obstante, indican que las estimaciones para el segundo semestre apuntan a registrar un crecimiento moderado.
Fuente: eldeber.com.bo
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