En estos días, la creciente demanda de cemento en el Medio Oriente asegura un aumento en los pedidos. Además, se solicita a los proveedores de equipos que expandan y modernicen los operadores de la planta. Un ejemplo actual de tal expansión de la capacidad es el aumento de la capacidad del horno rotatorio en una planta de cemento en Omán, que necesariamente resultó en la instalación de un elevador de cangilones más eficiente para la carga.
Con la mejora técnica del horno rotatorio en Oman Cement Company (OCC) en los últimos años, ya en 2016 se detectó el rendimiento inadecuado del elevador de cangilones existente. La única solución económica fue la instalación de un nuevo elevador de cangilones, que ya estaba un desafío al comienzo de la construcción como resultado de la documentación inadecuada del fabricante de la planta china y el espacio limitado dentro y alrededor de la torre de precalentamiento.
Debido a las experiencias positivas con el proveedor alemán KoWey de Kamp-Lintfort, con quien el operador de la planta ya ha completado con éxito 14 proyectos hasta el momento, la OCC decidió una vez más optar por un elevador de cangilones de esta empresa perteneciente al Grupo Heko.
Sin embargo, la ingeniería de la planificación del proyecto demostró ser extremadamente difícil. Se necesitaron varias designaciones locales para determinar las dimensiones exactas del edificio, la estructura de acero existente y, en consecuencia, el espacio libre disponible para el elevador de cangilones más grande.
La tolerancia a fallas en los cálculos fue mínima ya que el sistema estaba en una operación de veinticuatro horas y parte de la cadena de producción directa. A pesar de que la producción debe continuar durante la instalación, cualquier error de construcción causado de antemano por una medición incorrecta o un cálculo incorrecto podría haber provocado paradas de planta no planificadas y costosas. Pero la instalación funcionó sin errores. El nuevo elevador de cangilones se integró al flujo de material mediante toboganes de aire, mientras que el antiguo sistema, que hasta ese momento había sido sobrecargado, se desacopló. Luego de una fase de estudio y diseño exigente, el nuevo elevador de cangilones puedo entregarse al cliente en unas pocas semanas, fue instalado por el contratista local y se puso en marcha con éxito bajo la supervisión de KoWey.
El nuevo sistema es un elevador de cangilones de cadena central KCT50 / 710-320 con una distancia entre centros de 74,5 my una potencia del motor de 110 kW, que transporta 250 t/h de harina cruda. Como parte de este contrato, KoWey también supervisó la ingeniería de los nuevos componentes de la planta y el suministro de todos los deslizadores de aire entrantes y salientes con elementos de control, conductos conectados, la plataforma de mantenimiento en la base con una pequeña escalera, los soportes horizontales y el ensamblaje plataforma en la cabeza del elevador con viga de elevación y cabrestante grande a la planta baja.
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