Bolivia cuenta con un interesante plan de inversiones viales que incluye contratos valorados en US$300 millones.
A finales de septiembre, el presidente Evo Morales firmó un contrato valorado en US$63,7 millones para construir una carretera en el centro del país.
Un proyecto destacado es la carretera entre El Espino y Boyuibe.
Esta nueva carretera de 40 km de longitud será construida por la empresa local Constructora Rubau entre Puente Taperas y La Palizada (Santa Cruz). La nueva carretera trascurrirá por la región con los principales yacimientos petroleros y explotaciones de gas del país.
Otro proyecto destacado es el valorado en US$253 millones y por el que la empresa china Railway Group construirá una carretera de 159 km de longitud entre El Espino, Charagua y Boyuibe. De esta forma, Santa Cruz estará conectada con los departamentos de Chuquisaca y Tarija.
Un tercer proyecto de gran envergadura corresponde a la licitación internacional para construir la carretera entre San José de Chiquitos y San Ignacio de Velasco, de 208 km de longitud y con un presupuesto de US$230 millones. A este se une la firma de un contrato con la empresa Técnicas Generales de Construcciones para construir una carretera de doble carril valorada en US$118 millones entre Warnes y Santa Cruz durante un periodo de 40 meses.
Por último, se lanzó otra licitación valorada en US$115 millones para la financiación de tres proyectos viales: Proyecto Nazacara, Zudañez-Padilla y Tarata-Anzaldo-Río Caine.
El gobierno boliviano está mostrando una gran actividad promotora de proyectos viales en los últimos meses, en especial desde que Evo Morales fue relegido el pasado en ero para un tercer mandato. El presupuesto del país para infraestructura en 2015 ascendió a US$2.500 millones. Compañías como Frontera, China Harzone y José Castellone han ganado contratos gubernamentales.
Un proyecto destacado es la carretera entre El Espino y Boyuibe.
Esta nueva carretera de 40 km de longitud será construida por la empresa local Constructora Rubau entre Puente Taperas y La Palizada (Santa Cruz). La nueva carretera trascurrirá por la región con los principales yacimientos petroleros y explotaciones de gas del país.
Otro proyecto destacado es el valorado en US$253 millones y por el que la empresa china Railway Group construirá una carretera de 159 km de longitud entre El Espino, Charagua y Boyuibe. De esta forma, Santa Cruz estará conectada con los departamentos de Chuquisaca y Tarija.
Un tercer proyecto de gran envergadura corresponde a la licitación internacional para construir la carretera entre San José de Chiquitos y San Ignacio de Velasco, de 208 km de longitud y con un presupuesto de US$230 millones. A este se une la firma de un contrato con la empresa Técnicas Generales de Construcciones para construir una carretera de doble carril valorada en US$118 millones entre Warnes y Santa Cruz durante un periodo de 40 meses.
Por último, se lanzó otra licitación valorada en US$115 millones para la financiación de tres proyectos viales: Proyecto Nazacara, Zudañez-Padilla y Tarata-Anzaldo-Río Caine.
El gobierno boliviano está mostrando una gran actividad promotora de proyectos viales en los últimos meses, en especial desde que Evo Morales fue relegido el pasado en ero para un tercer mandato. El presupuesto del país para infraestructura en 2015 ascendió a US$2.500 millones. Compañías como Frontera, China Harzone y José Castellone han ganado contratos gubernamentales.
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