El Banco Mundial (BM) informó este lunes que aprobó un préstamo de USD 118.5 millones para financiar el Programa de Resiliencia Climática del Sector Vial, que beneficiará a más de 165 000 habitantes de los municipios de Chimoré e Ivirgarzama, en Cochabamba; Guanay, en La Paz, y Monteagudo, en Chuquisaca.
El objetivo del programa es mejorar la resiliencia climática y la seguridad de puentes y tramos de carreteras en el país.
Un país vulnerable al cambio climático
Bolivia, según el organismo internacional, se encuentra entre los diez países más vulnerables al cambio climático a escala mundial.
En los últimos años, ha sufrido daños considerables, debido a eventos climáticos extremos, como altas temperaturas y precipitaciones intensas, que han generado deslizamientos e inundaciones con un impacto económico y social significativo.
El Programa de Resiliencia Climática del Sector Vial se centrará en dos componentes principales: el desarrollo institucional y generación de capacidades.
Para esto se llevará a cabo un diagnóstico exhaustivo de los riesgos climáticos, las prioridades de resiliencia climática y las capacidades institucionales de las entidades que administran la red vial nacional. Se elaborará una estrategia para mejorar la respuesta eficaz a los retos actuales y futuros en este ámbito.
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Detalles del proyecto
Se construirán tres subproyectos con un enfoque de resiliencia ante desastres climáticos para reducir el riesgo de posibles incidentes en tramos clave de la Red Vial Fundamental.
Por ejemplo, en la carretera Chimoré-Ivirgarzama (32 km), se completará la construcción de una vía de doble calzada, incluyendo un nuevo puente y sus accesos, el reemplazo de alcantarillas, acceso a viaducto existente y puentes peatonales.
En Guanay, se construirá un puente de dos carriles y alrededor de 200 metros de largo, minimizando las vulnerabilidades climáticas y maximizando las medidas de seguridad vial.
En el tramo III Molino-Monteagudo (13 km), se rehabilitará un tramo existente y se construirá un nuevo camino rural (circunvalación) para evitar el área urbana.
Fuente: El Deber